jueves, 24 de octubre de 2013

Interculturalidad en los medios de comunciación

A medida que pasan los tiempos y el avance tecnológico, las comunidades indígenas y nativas registran avances significativos a nivel de los medios de comunicación radial, televisiva y digital.

Basta con recorrer las diversas zonas del interior del país para ser testigo del auge comunicacional de esos sectores de la población que en sus lenguas de origen dirigen y producen programas radiales, sean estos hablados o musicales.

Lo importante de esto es la predominancia del quechua, el aymara, y la cantidad (42) de idiomas que utilizan los sectores amazónicos para compartir sus rasgos culturales y étnicos.

Pero esto no significa que estas comunidades no empleen el idioma español en sus medios de comunicación. Hay una fusión de ambos. Una fusión que ya se ha trasladado a las principales ciudades por la misma migración de la población.

No es novedad escuchar noticieros, transmisiones de fútbol y a los conductores presentando sus músicas en sus idiomas de origen. Es un valor que debe preservarse para revalorar nuestra cultura y pasado, pero que eso no debe significar la exclusión o el racismo por otros sectores de la sociedad.

Lo curioso es que estas personas que conducen espacios en sus alejadas zonas al llegar a una ciudad dejan de lado su idioma de origen y se adaptan al español por temor a ser discriminado. Lo cierto es que hoy nuestras grandes urbes están llenos de una mezcla de todo origen e idioma.

En ese contexto, los ciudadanos también tenemos la cantidad de medios de comunicación radial para identificarnos con nuestra forma de hablar y costumbres. No debemos perder nuestra identidad cultural y lingüística.

miércoles, 9 de octubre de 2013

Liderazgos que crea la radio

Desde su aparición la radio siempre ha tenido voces características. Voces que no sólo han identificado su señal sino que en muchos casos se han convertido en la voz de un pueblo que aspira siempre encontrar solución a sus necesidades.

Cada región tiene su líder de opinión, un líder que se caracteriza por encarar a las autoridades de las falencias que tienen con sus representados, está en constante fiscalización de sus actos, fija una opinión que es similar al de sus oyentes y es un abanderado en la lucha contra la corrupción y el progreso.

Pero, para eso la población requiere que ese líder de opinión sea coherente en sus principios, una persona transparente y no sometida a los poderes políticos o económicos. Además, ese ciudadano debe estar al margen de quiénes puedan hacer uso y abuso de un micrófono para chantajear o extorsionar a una autoridad o empresa con fines de lucro.

Ese tipo de periodismo debe ser desterrado de nuestras emisoras o medios de comunicación en general. Las radioemisoras son formadores de valores éticos y no de líderes interesados en sacar provecho de su ventaja de estar al frente de un micrófono.

Felizmente, la historia nos muestra que muchos líderes radiales que llegaron al Congreso de la República u otros cargos públicos cumplieron con honestidad en sus funciones; aunque seguramente no lograron ese liderazgo -en algunos casos - para hacer realidad sus propuestas.

Especialmente me refiero a los periodistas o líderes de opinión radial que provienen de nuestras regiones. Pues es ingenuo pensar que desde Lima tengamos líderes de opinión para todo el país por más respetados que sean. Claro nadie niega su trascendencia y valoración que tienen en la ciudad. Por eso en cada zona donde hay una radioemisora está un líder de opinión, un líder que es la voz de su pueblo.

      

sábado, 5 de octubre de 2013

Periodismo radial en "decadencia"

Recordar lo pasado siempre es bueno. Es bueno porque uno recuerda el auge de espacios noticiosos en diversas radios de Lima. En lo personal a mi llegada a Lima en la década de los 80 procedente de Huaraz (Ancash) está marcada por emisoras en Amplitud Modulada, con un buen porcentaje de programación informativa.

Me refiero por ejemplo a la histórica y tradicional Radio Reloj, cuyo tic tac a cada instante nos genera nostalgia a quienes vivimos de la noticia y pendiente de las novedades del día. No era una emisora con despliegue en vivo y directo de reporteros y conductores como lo es ahora Radioprogramas del Perú, sino una estación que te  difundía noticias de actualidad durante las 24 horas.

Las características voces de locutores (disculpas por no recordar los nombres, pero eran generalmente masculinos) repetían a cada momento las mismas noticias previamente clasificadas de los diarios. No tenía un pool de redactores sino que su sustento estaba en las noticias que publicaban los diarios.

La gente se quedaba enganchada por esas novedades y claro por la hora. La memoria me falla en que año desapareció del dial esta emisora noticiosa a pesar que tuvo intento de reflotamiento, pero quedó silenciado como sucedió con CPN Radio recientemente. En ambos casos por dominio del mercado radial informativo de RPP.

No solo estaba radio Reloj, sino también Radio Cora, con el radio periódico El Mundo, dirigido por Juan Ramírez Lazo y su característica frase: Nos preocupa. Se trataba de una persona influyente con sus opiniones sobre temas políticos y locales desde que se inició en Radio Victoria.

La noticia también tenía un buen espacio en Radio Unión que no solo se caracterizaba por la voz de Óscar Artacho en deportes sino por la presentación de sus noticias con enlaces desde las diversas zonas del interior del país.

En lo personal debo confesar mis inicios en el periodismo radial en el año 1982 fue en Radio América, que funcionaba en la parte baja del actual local de América Televisión en Santa Beatriz.  Era como una suerte de sótano, donde estaba la sala de redacción y las cabinas de locución como de edición.

Debo expresar mi gratitud a Tyler Grandes, director del noticiero, que se compadeció de mi interés por practicar en dicha emisora a pesar que recién ingresaba al segundo ciclo de periodismo.  Ahí encontré a profesionales de primera línea, como Gualberto Gamarra y Fernando Vásquez, ambos unos maestros para formular preguntas y con amplio conocimiento de temas políticos y económicos. Vásquez llegó a conducir espacios políticos en Panamericana y Frecuencia Latina hasta que dejó de existir.

También estaban Heraldo Torres vinculado a temas laborales, el flaco Orbegozo que se fue al exterior, así como Soto, Ramón Requena que compartía con labores de la televisión y otros señores periodistas que para un principiante como yo eran unos grandes maestros por unos meses hasta que decidí dar paso a Radioprogramas.

Pero retomando el tema de las emisoras noticiosas, también es bueno recordar que existió radio Star de los Maldonado. La parte periodística estuvo a cargo de David Odría, cuyo estilo de redacción de sus titulares y notas nunca más lo volví a escuchar. Hoy los titulares que escucho están muy lejos de igualarse. Es que le falta la picardía, la criollada y sarcasmo.

En fin no quisiera aburrir con este recuerdo, pero no puedo obviar a Radio Nacional, Radio 1160, Radio Miraflores, Radio Sol, Radio Omega, Radio Libertad, entre otros, que también competían en el mercado de las noticias.

Un punto a parte se merece RPP que está cumpliendo 50 años en el aire. Sus inicios se caracterizaron por bloques noticiosos y Doctora Corazón, espacio que "paralizaba" la ciudad. Radioprogramas se merece una nota aparte, pues fui testigo por seis años de cómo  comenzó con sus transmisiones en vivo y despliegue de reporteros, así como su plantel de redactores y editores. Me parece que los únicos sobrevivientes desde la década de los 80 son Miguel Humberto Aguirre y Jesús Miguel Calderón en forma continúa.

Este breve recuento, sólo tiene el propósito de preguntarse: ¿ En qué momento la noticia se alejó de la radio?. Pues, actualmente, solo tenemos RPP las 24 horas con noticias seguidas de Capital, Exitosa y Nacional que además las nuevas generaciones pueden seguir por Internet y las nuevas tecnologías.

La música desplazó las noticias con la aparición de la Frecuencia Modulada. Pero un día seguro volverán a resurgir las emisoras de Amplitud Modulada (AM), hoy dedicadas al folcklore y espacios cristianos.

Concentración de la prensa escrita en el Perú

La situación de los medios de comunicación en el Perú no puede estar al margen de los debates y foros,  más aún cuando cada 1 de Octubre se recuerda el Día del Periodista, una fecha para reflexionar de la responsabilidad que tenemos los comunicadores con la sociedad y con el fortalecimiento de nuestra democracia.
 
Como amantes de esas libertades que nos garantiza una democracia vemos con preocupación el debate generado por el director del diario La República, Gustavo Mohme Seminario, quien luego de su frustrada compra del 54 por ciento de las acciones del Grupo EPENSA, denuncia el monopolio en la prensa escrita creado por el Grupo El Comercio, por haber adquirido las acciones de la empresa que edita los diarios Ojo, Ajá, Correo y el Bocón.

Puede ser que tenga razón frente al más del 77% del mercado de ventas de periódicos de circulación nacional que ahora posee el grupo Comercio, pero uno siempre se pregunta: ¿Qué hubiese pasado si materializaba dicha compra?.  ¿La misma actitud hubiese mantenido?. No está en discusión el compromiso y su absoluta defensa de la democracia y la libertad de expresión, pues su historia y presente lo demuestra así.
Lo importante de todo esto, es el debate que se genera sobre la libertad de empresa y la concentración de los medios en manos de un grupo de poder, que – según Mohme -  constituye “un récord mundial, pues ese tipo de escenarios no se observa ni en países como Venezuela, que tienen restringida la libertad de prensa por su gobernante autoritario”.

Más allá del peligro que constituye esta concentración económica, también hay otros riesgos que pueden atentar contra la libre empresa, especialmente de los considerados “chicos”. Se trata de los vendedores de diarios y revistas que se han convertido en un fortín en este negocio que no permite la participación de otros como sucede en otras naciones.
Lamentablemente aquí  todo empresario que incursione en la publicación de un diario o revista tiene que pasar por esta federación para poder vender sus ejemplares y aceptar sus condiciones. Ahí creo que el mencionado empresario con acciones en América Televisión tiene otro frente a su advertencia del monopolio. Ese monopolio hay que romper primero. Sí hace años que estamos en un libre mercado ¿por qué cada medio de comunicación escrita no puede optar por su mecanismo de comercialización de sus productos?.

Solo sería necesaria una licencia municipal para que pueda instalarse una caseta para que la gente pueda adquirir el diario como se observa en otros países, pero aquí tenemos que ir a kioskos o ante las personas autorizadas para ese gremio, para adquirir nuestros ejemplares.
Pero eso parece que no es factible en este momento, pues muchos empresarios ya tendrían esos mecanismos de venta de sus diarios y revistas.  Una tarea que parece también le compete a INDECOPI.